Entre el cielo y el suelo

Tenemos mucha suerte de vivir donde vivimos. Y deberíamos valorarlo en su justa medida. Porque lo tenemos casi todo. Es verdad que en Tres Cantos no hay playa. Pero sí un magnífico Parque Central por el que da gusto pasear a cualquier hora del día…y de la noche. Ahora que llegamos al verano y los días se alargan, tenemos una ocasión estupenda para disfrutar de cualquiera de las actividades que nos permite un entorno verde único en su género. En estos días, además, esas actividades se multiplican, porque tendremos la oportunidad de participar en juegos, de escuchar música en directo, de hacer yoga al amanecer o buscar nuestras estrellas favoritas en esa inmensidad azul que nos deja atónitos.

Juntos por el Parque, con amigos o en familia, cada uno como prefiera, podremos conocer mejor ese espacio en el que cada día, muchos tricantinos entrenan, otros pasean, y todos nos relajamos respirando su aire puro.

Tres Cantos no sería lo mismo sin su Parque Central, desde luego. Como tampoco sería la ciudad envidiada que es si no tuviera esas grandes avenidas por las que discurren nuestras vidas entre árboles y comercios, entre bancos en los que sentarse a ver el tiempo pasar y terrazas en las que compartir un rato de charla tranquila con quien queramos.

Entre todos hemos conseguido dar forma a uno de los mejores lugares para vivir. Y ahora tenemos que cuidarlo para quienes vienen detrás de nosotros. Dejar un legado. Pero tampoco lo hemos hecho solos.

Debemos mucho de nuestro bienestar y progreso a empresas grandes y pequeñas. Profesionales que cada día ponen a Tres Cantos en el mundo con sus productos, con sus servicios, con sus logros. En el mundo y fuera de él, porque allá arriba, en ese espacio exterior que nos envuelve, orbita mucha tecnología “Made in Tres Cantos”. Y en un momento como el que vivimos, con tanta dependencia tecnológica, el sector espacial constituye uno de los más estratégicos para el progreso y para la seguridad de todos.

Esta semana hemos tenido el placer de acoger en Tres Cantos a representantes de las más importantes empresas, organismos e instituciones del sector espacial, debatiendo sobre la legislación que debe regular un entorno económico, civil y militar, tan complejo como maravilloso.

Nos negaron la sede de la Agencia Espacial Española, pero seguimos siendo una potencia dentro del ecosistema espacial. Por eso nos han elegido también para alojar el proyecto más innovador de observación terrestre, XOOPLE.

Así que no cabe duda de que entre el cielo y el suelo hay algo. Un municipio del que podemos sentirnos muy orgullosos.